viernes, 11 de julio de 2014

ECO DE TI




Me queda el eco de tu piel.
Te fuiste calle abajo,
silencio abajo,
recuerdo abajo.
Al final estás,
seguramente estás,
pero no eres posible.
Huecas mis manos de ti.
Sin ti el tacto.
Como lejana,
Como  ajena.
Distante cercanía.
Ausencia contigo.
Vacío de ti pero teniéndote.
Extraño todo,
Inexplicable,
pero real
como cuando las bocas,
como cuando las caricias,
como cuando se fundió
en tu cuerpo mi cuerpo.
Como cuando era entonces
y tenían volumen los besos
y relieves tus labios,
tus pechos,
tu vientre,
tu sexo.
Como cuando recorrías
la dimensión vertical de mi carne.
Me queda el eco de tu piel,
la huella de tu marcha,
la dirección de tu silencio último,
como cuando te fuiste
calle abajo,
no sé a dónde,
al final de ti,
al final de tu nombre,
donde empieza la lluvia
y el mar empieza
y la arena es cuerpo
y espuma
y gemido
y silencio.
Tendré que regresar a ti
a tientas,
palpando sólo

el eco de tu piel.

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